Cuando cumplimos una labor en obediencia y amor, nos queda la satisfacción que todo lo hemos hecho para el Señor, empleando nuestros recursos y tiempo; que hermoso es sentirse bien con nuestro Señor y los hermanos. En nuestra denominación Iglesia del Señor Apostólica cada año hay un renuevo en las Directivas de las Iglesias, que son gobernadas por el pastor y la Junta de Oficiales y Diáconos. Muchos de nuestros hermanos regresan a sus tiendas con gozo, otros siguen trabajando con gozo ¿Quién es el que queda satisfecho?
Leemos en Josué capítulo 22:
"Entonces Josué llamó a los rubenitas, a los gaditas y a la media tribu de manasés y les dijo:
Vosotros habéis guardado todo lo que Moisés siervo de Jehová mandó, y habéis obedecido a mi voz en todo lo que os he mandado.
No habéis dejado a vuestros hermanos en este largo tiempo hasta el día de hoy, sino que os habéis cuidado de guardar los mandamientos de Jehová vuestro Dios.
Ahora, pues, que Jehová vuestro Dios ha dado reposos a vuestros hermanos, como lo había prometido, volved, regresad a vuestras tiendas, a la tierra de vuestras posesiones, que Moisés siervo de Jehová os dio al otro lado del Jordán."
Donde estemos, en el frontis de la batalla o descansando en las Tiendas, tenemos un compromiso con el Señor. Cuando llega el tiempo Dios nos aparta para su servicio en el frente, donde arrecia el temporal, también cuando llega el tiempo Dios nos saca a las tiendas, a la familia, a la labor de cuidado y limpieza de los míos. Todos estos hermanos que llamó Josué habían sido fieles y llegó el momento de que Jehová les dé reposo. Pero les ecuerda:
Amar a Jehová su Dios.
Andar en todos sus caminos.
Guardar sus mandamientos.
Seguir a Dios.
Servirle de todo corazón y con toda el alma.
Oh, hermano/a tú que descansarás este año no pierdas el horizonte, tu objetivo; no caigas en el sueño, que no te roben el aceite. Trabaja en tu tienda, todo lo que rodea tu tienda es tu territorio...ENSÁNCHALO, AFIRMA BIEN TU TIENDA, no estas solo o sola, de tí dependen tus seres queridos. Oh hermano/a no aceptes que critiquen injustamente a tus hermanos y hermanas que trabajarán este año, tú sabes que muchas veces siembras con lágrimas, que el dinero no alcanza para ir donde deseas, que tu familia también te exige atención y que la batalla es mortal contra las heustes del diablo.
El descanso espiritual no hace bien, te aprietan, te destruyen, y no tienes deseos de correr, porque faltan fuerzas. Si puedes seguir trabajando dí ¡Amén! ¿Por qué no podrías? Creo que sería sólo porque Dios no lo permitió. Pero el desea ver voluntad. Eres servicial, un vaso especial, Dios te creo con un propósito...ACTIVA ESE PRÓPÓSITO...¡¡¡A TRABAJAR!!! Te necesitamos...
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