martes, 6 de enero de 2009

LA BIBLIA Y EL CELULAR.(Por Pr. Pedro D Soto)


¿Se imaginan qué pasaría si tratáramos a nuestra Biblia de la misma forma en que tratamos a nuestro celular?
¿Y si siempre cargáramos nuestra Biblia en la cartera, en el maletín, en el cinturón o en el bolsillo del traje?
¿Y le diéramos una ojeada varias veces al día?
¿Y nos volviéramos para buscarla cuando la olvidamos en casa o en la oficina?
¿Y si la usáramos para enviar mensajes a nuestros amigos?
¿Y si la tratásemos como si no pudiéramos vivir sin ella?
¿Y si la diéramos de regalo a los chicos, para su seguridad, y para estar comunicados con ellos?
¿Y si la lleváramos cuando viajamos, en caso de necesitarla como auxilio y ayuda?
Al contrario del celular, la Biblia no se queda sin señal jamás:
Nos podemos conectar con ella en cualquier lugar.
No precisamos preocuparnos por la falta de crédito, porque Jesús ya pagó la cuenta y los créditos no tienen fin.
Y lo mejor de todo: no se corta la comunicación, y la carga de batería es para toda la vida.
Busca al Señor mientras puede ser hallado, llámenlo porque está cerca. (Is 55,6)

*TELÉFONOS DE EMERGENCIA:
Cuando estés triste, marca Juan 14.*Cuando las personas hablen de ti, marca Salmo 27.
*Cuando estés nervioso, marca Salmo 51.
*Cuando estés preocupado, marca Mateo 6, 19,34.
*Cuando estás en peligro, marca Salmo 91.
*Cuando Dios parezca estar lejos, marca Salmo 63.
*Cuando tu fe precise ser fortalecida, marca Hebreos 11.
*Cuando estés solitario y con miedo, marca Salmo 23.
*Cuando estés duro y crítico, marca 1 Corintios: 13.
*Para saber el secreto de la felicidad, marca Colonenses 3,12-17.
*Cuando te sientas triste y solo, marca Romanos 8,31-39.
*Cuando desees paz y descanso, marca Mateo 11,25-30.
*Cuando el mundo parezca más grande que Dios, marca Salmo 90.
*Cuando todas las líneas parezcan no funcionar marca línea directa, marca Jeremías 33:3*
Publicado por Pedro Daniel (Pastor de Santiago)

1 comentario:

Patagona dijo...

Me hizo reflexionar respecto a lo que ojala hiciéramos, lo sencillo que es en realidad estar en directa relación con nuestro padre y muchas veces, lo dejamos a un lado.

Quisiera enviarle ese artículo a mis conocidos para que tengan la oportunidad quienes lo lean de pensar un poquito al menos en nuestro Señor.

Graciasupermeou